65-66. 5, c. (véase texto en nota 62). Ricardo Yepes, op. (81) “Para poder aprehender el objeto de un acto, ... hay que situarse en la perspectiva de la persona que actúa”: Veritatis splendor, n. 78. S. Por otra parte, la aprobación de la conducta defensiva no quita que también pueda ser buena en ciertos casos la conducta no defensiva, que puede ser razonable, exigida por la caridad e incluso heroica. Elementos del acto moral. Cfr. Esto hace que, a la hora de considerarlos desde el punto de vista moral, haya que poner en juego dos ideas. Una persona va a abrir una ventana porque siente necesidad de aire fresco; ningún acto podría ser mas natural, mas moralmente indiferente en apariencia. El acto moral implica no solo los motivos, sino la conciencia de un fin y la decision, de realizarlo, pero la decision en muchos casos presupone la eleccion entre varios, fines posibles, lo que hace que la conciencia escoja uno, que nos daria un. Para conseguir que el hombre pueda pensar Ideas, Platón debe postular que el hombre es el alma. (88) Spaemann R. Los efectos secundarios como problema moral. : Vengarse del engaño y de la amistad que tenían. Motivos e intensiones. Pero, desde el punto de vista teórico-esencialista, la solución del caso se presenta bastante problemática. Sin embargo, este capítulo se desarrolla de modo relativamente independiente de las reflexiones filosóficas: no suele ser una deducción, a partir de la naturaleza del obrar humano, del papel y valor de la ignorancia dentro del obrar moral, sino una serie de reflexiones, sumamente acertadas, sobre la valoración moral que merece cada tipo de ignorancia. Washington, Georgetown University Press 1986, 220 pp., pp. De lo contrario, es impracticable25. No son intentados, pues no son el fin pretendido. Lottin, op. 2. Por ello, se hacía necesario centrar la cuestión en los actos del sujeto, y evitar los tecnicismos filosóficos dentro de lo que fuera posible, a la hora de examinar los actos desde el punto de vista ético. Sin embargo, su utilización práctica en la valoración de situaciones concretas plantea varios problemas. Esta nueva complejidad ha hecho aparecer, en el panorama moral, aspectos nuevos, que no existían cuando Santo Tomás elaboró su teoría ética: los efectos secundarios de las acciones. "@context":"http://schema.org", Sin embargo, como la integración de la valoración de los efectos con el resto del acto moral no es el objeto de su discurso, no aporta más precisiones a este respecto. Pero el fin y el objeto moral no son actos de la voluntad. Y este espíritu conciliador provocó malentendidos posteriores. Pero no sólo son comportamientos o sentimientos, también se expresan en códigos: morales, jurídicos o religiosos. Richard A. McCormick. Al final de este trabajo también podrá encontrar un resumen personal a manera de conclusión sobre el tema tratado en esta investigación. Los agustinistas, inspirados en el platonismo, son partidarios de que Dios ilumina la inteligencia para que el hombre pueda conocer los “algo” de las cosas materiales: de la inteligencia de Dios, que tiene las ideas, viene la luz intelectual y el conocimiento al hombre. Pero como los agustinistas consideran que las formas son como las Ideas de Platón, iguales a sí mismas, indestructibles, únicas, etc., necesitan que las nuevas formas estén en alguna parte para que aparezcan en el resultado del cambio. Para estudiarlas, hay que enfocar las cosas de otro modo: ver si los efectos tolerados son proporcionados con lo que se intenta, independientemente de que la voluntad que los provoca se pueda relacionar con ellos de un modo u otro. 18, a. Última edición el 21 de mayo de 2021. Avisar al dependiente y devolver lo que te dieron de más es un acto moral que denota honradez y preocupación por los otros (considera que el faltante podría ser descontado al empleado). Queda por hacer una última y breve precisión sobre las expresiones “voluntario indirecto” y “voluntario in causa”. Esta acción se describe con palabras: conducir un coche, cazar, etc. Catecismo de la Iglesia Católica, n. 1754. Partiendo de aquí, el análisis tomista del acto moral muestra aspectos distintos a lo que hemos visto anteriormente. Además, en el estudio tomista, la conexión de los efectos con el sujeto es patente: el agente moral los tolera. No obstante, si se emplean aquellos términos, debe tenerse la precaución de aclarar que no se refieren a las acciones físicas, sino que expresan cuál es la decisión-acción del sujeto, el acto de su voluntad. Por tanto, lo “voluntario in causa” es también voluntario, pero de un modo peculiar: la intención no es del efecto “voluntario in causa” sino sólo de la causa. No es que los pretenda (no son su intención). Usar el tapabocas, más allá de las razones aducidas por los organismos de salud, se convierte en un acto moral, porque de esta manera nos aseguramos de no estarnos convirtiendo en un factor de contagio, y contribuimos al bienestar general. cit. Actos del hombre, son aquellos ut est natura quaedam, es decir son aquellos que no tienen significado moral, los que no podemos elegir -respirar, hacer la digestión y cosas por el estilo-. resultado ideal, no efectivo, pero preferible a los otros posibles. Como parte de esta dificultad, se oscurece también la conexión entre los efectos o consecuencias de la acción y la voluntad del sujeto que actúa. El acto moral implica una decisión individual. Y la argumentación aristotélica llegada a Occidente es tan rigurosa, que los agustinistas medievales deben volverse atrás de sus posturas clásicas: la iluminación divina al entendimiento humano para poder conocer, las rationes seminales, y otros muchos detalles que no es ocasión citar ahora. Si los efectos tolerados guardan proporción con lo que se intenta. Por tanto, los tratados y manuales incluirán un capítulo dedicado a la ignorancia, sus tipos y repercusión sobre los actos morales. Además del sentido del término “circunstancias” que explicamos aquí, existe un segundo sentido, también presente en Santo Tomás, distinto, que analizaremos en el apartado d), 4. Morale fondamentale. Th., Iª-IIae, q. Save. Por tanto, el objeto moral es con respecto a la decisión lo mismo que el fin con respecto a la intención: aquello sobre lo que versa43. 20, a. 7, a. Lo que se considera es: si es bueno o malo querer esos efectos, si es adecuado al hombre poner su voluntad en ciertas cosas que son efecto de su actuación71. Son los resultados previstos o no de la acción moral. Al analizar el acto moral, el esencialismo considera que los actos de la voluntad son actos en sentido esencialista, es decir, “algo”. Parece dudoso que, con excepción de Santo Tomás (con su discípulo Tomás de Sutton, y quizá San Alberto en algunas cuestiones), haya habido filósofos medievales que no tuvieran mentalidad agustinista. Todo el mundo tiene una respuesta diferente a esto. En el fondo de la conciencia humana casi siempre se revela una responsabilidad que hay que afrontar, Ámbito moral se constituye por los actos morales, El acto bueno exige, bondad tanto en el medio como en el fin. Otras formulaciones del principio de la acción de doble efecto también se pueden reconducir, sin especiales dificultades, a los principios tomistas expuestos aunque, por brevedad, omitiremos poner aquí más ejemplos. Por tanto, si consideramos la decisión-acción en vez del objeto moral (consideración que, como hemos visto, resulta menos desorientadora), las circunstancias son superfluas, pues están incluidas en la decisión-acción: son un complemento (indudablemente necesario) de su definición, que nos viene dada por el objeto moral. Acto moral. cit., p. 59-60 y Richard A. McCormick, op. Th., Iª-IIae, q. Giri. La dinámica del obrar humano y los elementos del acto moral Cuando la moral cristiana señala como elemento de la moralidad el objeto, fin y circunstancias, no hace sino contemplar el acto moral en concreto y en su génesis dinámica. Se considera que un acto es moral cuando se ajusta o va en contra de un código, una norma o un sistema de valores. “La consideración de estas consecuencias —así como de las intenciones— no es suficiente para valorar la cualidad moral de una elección concreta. (6) Cfr. Resultado. El hombre desarrolla así una actividad que le permite “tocar” cosas externas13. CLICK. 1- Motivacion Por motivacion puede entenderse como aquello que impulsa a actuar o perseguir determinado fin. 2.1. 9, c. (62) “Respondeo dicendum quod eventus sequens aut est praecogitatus, aut non. (27) “La ponderación de los bienes y los males, previsibles como consecuencia de una acción, ...”: Veritatis splendor, n. 77. Th., Iª-IIae, q. El discernimiento del actuar humano: contribución a la comprensión del objeto moral. Votar o abstenerse son actos morales porque señalan nuestro grado de compromiso con la democracia y con la sociedad donde vivimos. Si ha habido la previsión adecuada (acto de la prudencia imperado por la voluntad). Si de alguna cosa se puede decir que está en acto, que existe, o que tiene algún tipo de actividad, eso se debe a que en su interior hay un “algo” (equivalente a la Idea de Platón) que hace que la cosa esté en acto, exista o tenga algún tipo de actividad. Enero de 1997. Sin embargo, lo que la moral juzga no es la acción, sino el acto de la voluntad que la ejecuta. El acto moral es una totalidad o unidad indisoluble de diversos aspectos o elementos: motivo, fin, medios, resultados y consecuencias objetivas. Se oculta que es malo querer de modo práctico (decidir y ejecutar, decisión-acción) la muerte de alguien. Cfr. Las circunstancias tradicionalmente se enumeran como 7: quién, qué, dónde, con qué medios, por qué (es el fin), cómo, cuándo; pero dado como las hemos definido no se debe incluir en ellas el fin. Sin embargo, el personaje del cuadro decidió no ser "esclavo de las circunstancias"; sino enfrentarse a ellas al imponerse a sí mismo como fin último de su existencia la lucha por la libertad de su pueblo. Apuntarse a una ONG para ayudar a personas con necesidades. 3, c.). (55) “Plenitudo bonitatis eius [actionis] non tota consistit in sua specie, sed aliquid additur ex his quae adveniunt tanquam accidentia quaedam. Y dicha mentalidad hace que el agustinismo medieval defienda, entre otras, las tesis mencionadas. los seres humanos, es detallar las obligaciones y los derechos y finalmente. 60-74. Pero, al hilo de la crítica a estos excesos, deja suficientemente clara la relevancia de las consecuencias dentro del acto moral. Por las, representadas en esta hermosa pintura, podemos suponer que el personaje eligió como fin último de su vida luchar por la libertad de su pueblo esclavo, por esta razón es capaz de enfrentar con valor y en paz la muerte por fusilamiento, resultado de la decisión de rebelarse. En: “Theological Studies” 55 (1994), pp. ¿Y cómo se manifiesta esa buena voluntad? Con el paso del tiempo, los cultivadores de la filosofía tomista se han ido haciendo conscientes de la interpretación formalista o esencialista que se hacía de Santo Tomás. "@context":"http://schema.org", 13). Para examinar la licitud de acciones que tienen efectos buenos y efectos malos, estos tres elementos no bastan, y tienen que recurrir a la elaboración de unas reglas que permitan determinar si una acción con efectos buenos y malos puede realizarse sin culpa moral. Derivar de los valores éticos como la justicia, la libertad y el respeto. En suma: tampoco en este caso se puede considerar que los medios son efectos o consecuencias. [9] [10] Su padre, Landolfo, descendiente de los condes de Aquino, estaba emparentado con el emperador Federico II.Su madre, Teodora, era hija de los condes de Taete y Chieti. Su único defecto es que, al igual que las circunstancias y la conexión de la ignorancia con la moral, paradójicamente, carecen de fundamento dentro de la filosofía esencialista. Si los efectos secundarios guardan proporción con lo que se intenta o, si eran desconocidos, se han intentado evitar reduciendo al mínimo las innovaciones. Quedarse en el hospital con un amigo que se encuentra enfermo. Es, entonces necesario detallar su surgimiento a la vida social y por ende a la vida. 2021 SSN MPRES : 2664-4029 SSN RTUAL: 2707-3602 445 (30) “Intentio, sicut ipsum nomen sonat, significat in aliquid tendere. 85 y ss. También la Veritatis splendor hace numerosas referencias a las consecuencias de la acción como factor que hay que tener en cuenta para juzgar su bondad o maldad63. 1. Y el único modo de describir la decisión de una persona consiste en mencionar el “algo” de la acción, es decir, el objeto moral. 59-60). 2, 3 y 4. Por tanto, es necesario admitir que la conexión entre la voluntad y las acciones es distinta a la que afirma el esencialismo. Quizá por esta razón, su valoración de la influencia de los efectos de una acción sobre la moralidad nunca ha sido tan clara y límpida como la de Santo Tomás. S. Sin embargo, esta vuelta a Santo Tomás se ha realizado teniendo unas ideas previas. (12) Aunque los razonamientos tomistas que siguen son filosóficos, Pinckaers sostiene, acertadamente, que el análisis filosófico tomista del acto moral forma un todo con lo propiamente cristiano del comportamiento humano. 77, a. 31008 Navarra (72) Los consecuencialistas piensan que la actuación moralmente correcta tiene como objeto obtener un estado de cosas deseable. El medio es tan importante como el fin. Ahora bien, analizando solamente el acto de la voluntad no estamos en condiciones de juzgar la moralidad de la actuación de una persona. Para que esta forma mentis hubiera cambiado, tendría que haberse hecho tema de discusión ampliamente difundido el planteamiento básico que provocaba las tesis agustinistas, es decir, la igualdad de propiedades entre las formas de las cosas y las Ideas platónicas. Th., Iª-IIae, q. La Idea “gato” es sin más la pura “gateidad” que existe y navega por el mundo de las Ideas. 1- Motivacion ¿Qué es un deber en ética y valores? Los motivos son aquellos que te impulsan a realizar un acto. Th., Iª-IIae, q. cit., pp. "https://www.youtube.com/user/universidaddenavarra" La intención no es el fin, aunque el fin perseguido es lo que nos permite describir con palabras la intención. La interpretación que se da normalmente a esta cualidad consiste en afirmar que Platón realizó un trasvase ilícito de una propiedad lógica de los objetos pensados a la realidad, y es, indudablemente, la crítica más coherente que cabe hacerle. Esta consideración orienta la acción en el sentido de no emprender demasiadas iniciativas nuevas que vayan a complicar el panorama con efectos secundarios indeseados. "name":"http://www.unav.edu" Son las reglas del voluntario in causa o voluntario indirecto: que la acción en sí misma sea buena o indiferente, que la consecuencia mala no se siga directamente de la acción que se realiza, que se actúe con buen fin y que exista proporción entre el efecto bueno y el malo. 3) Pensar responsable, pensar en público. Ciencia, Educación, Cultura y Estilo de Vida, Explicamos qué es un acto moral, sus características, elementos y damos varios ejemplos. 1, c. (31) “La ordenación racional del acto humano hacia el bien en toda su verdad y la búsqueda voluntaria de ese bien, conocido por la razón, constituyen la moralidad”: Veritatis splendor, n. 72. El punto de vista moral que sostienen Santo Tomás y sus comentadores, así como la Veritatis splendor, se puede denominar moral objetiva51. Antonio Pardo. Ejemplos de Actos morales: 1- Ayudar al prógimo, 2- Actuar de forma pudorosa, 3- Respetar a los demás, 4- Comparti r, 5- Amar, 6- Educarse y educar, 7- Respetar las normas de convivenia, 8- Respetar las leyes, 9- No realizar discriminaciones, 10- Cuidar el medio ambiente. 12, a. La encíclica no trata específicamente de aclarar el papel de las consecuencias dentro de la valoración del acto moral sino, más bien, de señalar los excesos que pretenden cifrar la bondad o maldad de las acciones sólo en las consecuencias y en la intención. De hecho, McCormick, en su crítica al comentario de Hittinger a la Veritatis splendor, acierta plenamente a este respecto: lo que permite describir una acción es su qué humano; sin embargo, al poner como ejemplo que “self-stimulation for sperm testing is a different human act from self-pleasuring” muestra que no acierta a ver el objeto moral, el qué de la decisión, y reduce dicho qué al de la intención, mientras que, como cabe deducir, la acción quedaría reducida a un mero acontecer físico. Así, la materia, en ciertos movimientos (los accidentales) es un ente, y se puede describir con la palabra que designa su sustancia: “perro”, “gato”, etc. Sin embargo, puede descargarse de Internet el texto original de la investigación que dio lugar a esta obra en la dirección siguiente: https://www.unav.edu/documents/18304422/19109437/el-concepto-medico-de-futilidad-y-su-aplicacion-clinica.pdf; aunque el texto no está tan acabado, los conceptos fundamentales están perfectamente expuestos. Sin embargo, esta interpretación, al ser fruto de una mentalidad, no queda limitada a algunos apartados de su filosofía, sino que se extiende a todos aquellos aspectos en que difieren la interpretación tomista y la esencialista. Th., Iª-IIae, q. Juan descubrió que su esposa lo engañaba con otro hombre (Fernando). Los efectos secundarios son especialmente indomesticables: cuando se adoptan medidas para intentar prevenirlos o paliar sus efectos, estas medidas tienen, a su vez, otros efectos imprevistos que vienen a complicar las cosas. Ya ha quedado claro que la intención y la decisión (junto con la acción correspondiente) deben ser buenas. Ahora bien, la conexión entre el acto de la voluntad y la acción se produce por medio del “algo” en que coinciden ambos, por medio de su quidditas u objeto moral, que es a la vez definición del acto voluntario y descripción humana de la acción física; la acción es un determinante de la voluntad gracias a esa quidditas. Giuseppe Abbà, op. Desde este enfoque, el aristotelismo define que existen cuatro causas del movimiento: lo que es movido (o materia), lo que da la actividad del movimiento (o causa eficiente o motriz), la contrariedad —los “algo” inicial y final del movimiento (o causa formal)—, y el acto acabado hacia el que tiende el movimiento (o causa final)5. Como hemos visto, al analizar la bondad de la actuación humana, estamos analizando fundamentalmente la bondad de su acto voluntario. Así sucede con Knauer que, por una parte, equipara intención y fin al hablar de “la «intención», es decir, la «finalidad del que actúa» ...” (Peter Knauer, op. El esencialismo descubre entonces que, en el análisis de la acción que daba Tomás de Aquino, existe otro elemento, las circunstancias, que permite encuadrar otros factores que no caben dentro del fin ni del objeto moral. Por eso, unos renglones más abajo, la encíclica explicita un poco más la frase anterior y afirma: “El objeto es el fin próximo de una elección deliberada que determina el acto del querer de la persona que actúa”17. El acontecer físico, los meros hechos, serían una ocurrencia, mientras que ese acontecer, ligado a la voluntad que lo quiere, se convierte en fin y, por tanto, adquiere calificación moral. Y, aun con el movimiento terminado, la palabra que nos permite designar el resultado del movimiento no nos describe el acto, sino la forma del acto. (1) Aunque podrían mencionarse bastantes más, los siguientes artículos son una muestra representativa de las distintas posturas al respecto: Peter Knauer. 3 y 4. Th., Iª-IIae, q. "name":"Universidad de Navarra", Si fuera pura potencia no tendría ningún “algo”, no sería ni siquiera pensable y, sin embargo, la estamos considerando ahora. Parece coherente que esos efectos, por derivarse de un acto de la voluntad, tienen relación con la calificación moral de esa voluntad que los provoca. Y a hemos dicho que el acto humano exige la intervención de las potencias. Esta orientación unitaria es la que permite dar continuidad y efectividad al conjunto de las acciones que, de otro modo, quedarían inconexas. 2, c.). Nuevamente, hablar sólo de objeto moral con respecto a la decisión-acción (del mismo modo que hablar sólo de fin con respecto a la intención) es confuso, pues cambia el acento de la moralidad, de la voluntad que realiza la acción (donde realmente radica el peso de la moralidad), al “algo” humano de la acción realizada. Download. 18, a. ELEMENTOS DEL ACTO MORAL El Sujeto moral: Este sujeto no es un ente abstracto o ideal, sino un ser concreto, ubicado en una . Th., Iª-IIae, q. Si se añade la circunstancia de que el asesinado tiene vínculos estrechos de parentesco con el asesino, el pecado pasa de llamarse asesinato a llamarse parricidio, una especie moral u objeto moral diferente. Pero la adquiere sólo porque es término de un acto de la voluntad, no porque en sí misma la ocurrencia contenga moralidad. ] Th., Iª-IIae, q. Fue Tomás el menor de nueve hermanos. Si falla una sola de ellas, la acción, globalmente considerada, será mala. 7, c. Aquí hay que entender intentionem en sentido amplio: todo lo que no cae dentro del acto de la voluntad, que es intencional. (90) Cfr. (67) De los estudiosos recientes, Grisez es quien mejor ha sistematizado esta conexión entre voluntariedad y efectos tolerados. Elementos y requisitos del acto moral. Este procedimiento es oportuno, ya que el esencialismo es la recuperación de la forma mentis del agustinismo medieval tras la introducción de Aristóteles en Europa occidental. Esta misma idea —la ética sólo se puede realizar considerando el punto de vista del sujeto que actúa— la refiere también Abbà (op. Así, quien se emborracha voluntariamente, es responsable in causa de lo que luego haga en estado de embriaguez86. 18, a. La libertad del acto moral está fundada, pues, en la capacidad que el ser humano tiene de imponerse a sí mismo fines que pretende alcanzar por encima y a pesar de las circunstancias que lo rodean, aún a costa de su vida. De no haber actuado con esa libertad, es decir, de haber asumido las circunstancias como la fuente de sus decisiones; simplemente habría intentado ser un buen esclavo, evitar a toda costa los castigos que su amo pudiera inflingirle. Sin embargo, esa descripción se puede quedar corta en el caso de ciertas acciones. Esta función es muy utilizada en literatura: refranes, rimas, poemas, textos dramáticos, canciones, entre otros. Th., Iª-IIae, q. De todos modos, dado que referimos las ideas a las cosas, este esquema básico debe ser más suavizado todavía: en las cosas que experimentamos sensiblemente existe también esa idea que está en la inteligencia divina. (60) Cfr. En el acto humano se distinguen tres elementos: objeto, fin y circunstancias. Caso contrario ocurre, personaje que será fusilado en este hermoso cuadro del pintor español Francisco de Goya. también nota 13. "https://twitter.com/unav", Th., Iª-IIae, q. El movimiento y la actividad de los seres es una percepción evidente, pero las palabras que empleamos para hablar de la realidad (“perro”, “gato”, “verde”, “tres metros”) no señalan a esa actividad, sino que se limitan a indicar la forma en que esa actividad se manifiesta. Resultado, DOCX, PDF, TXT or read online from Scribd, ELEMENTOS QUE ESTRUCTURAN EL ACTO MORAL ocurre que la elección del fin por parte del sujeto queda supeditada a las circunstancias, la voluntad se restringe. 19, a. Además, los moralistas también se dan cuenta de que hay acciones complicadas, de las que se siguen efectos buenos y efectos malos; ¿está permitido hacerlas? Por esta razón, se suele ver que las filosofías platonizantes realizan una composición “material” de las cosas a base de Ideas, que son principios aparentemente no materiales. Th., Iª-IIae, q. S. S. "@context":"http://schema.org", Cuestionario: Elementos de la estructura del Acto Moral - Dr Arturo Espin. Los efectos tolerados son, a su modo, voluntarios. Hemos mencionado que en el fondo de la forma mentis agustinista parece latir la consideración platónica de que “lo realmente real” son la Ideas, aunque convenientemente suavizada. Pueden existir otros medios que no sean objeto de la decisión: cuando la acción (ejecutada por la decisión) produce unos efectos que llevan al fin intentado, estos efectos son medios para el fin. ); y las morales o éticas, es decir, aquellas que pueden ser libremente elegidas y que implican consecuencias positivas o negativas. Y esto es lo que hace Tomás: después de establecer la división de la voluntariedad en el plano teórico, establece el procedimiento práctico de valorar la influencia de los efectos de una acción sobre su moralidad, sin aplicar la división teórica. Furioso y dolido por tal hecho, Juan buscó a Fernando para encararlo. Quien no reflexiona antes de actuar es porque no quiere, y eso es moralmente imputable. MAY-UL . (19) “La moralidad de los actos está definida por la relación de la libertad del hombre con el bien auténtico. Por motivacion puede entenderse como aquello que impulsa a actuar o perseguir determinado fin. Esta misma ambigüedad se da en la consideración esencialista del objeto moral, que unas veces se considera acto de la voluntad (y tiene naturaleza eidética) y otras veces se hace equivaler a la acción física (y tiene naturaleza material). No hay posibilidad de evitarlos completamente89. La voluntad del que se defiende justamente es buena, y eso es lo que hay que juzgar desde el punto de vista moral. 5, c. (64) Cfr. (34) “Bonitas voluntatis ex intentione finis dependet”: S. Aunque sería materia para una investigación más detallada, podemos esbozar la explicación siguiente: una vez derribado el planteamiento de las rationes seminales, el esencialismo encontró un lugar para el esquema platónico dentro de la descripción aristotélica del movimiento. (53) “La intención es buena cuando apunta al verdadero bien de la persona con relación a su fin último”: Veritatis splendor, n. 82. Et hoc modo addit ad bonitatem vel malitiam voluntatis: quia omnis inclinatio vel motus perficitur in hoc quod consequitur finem, vel attingit terminum”: S. 18, a. G. E. M. Anscombe. Unde si obiectum actus includat aliquid quod conveniat ordini rationis, erit actus bonus secundum suam speciem, sicut dare eleemosynam indigenti. Concretamente, el esencialismo piensa que los actos de la voluntad tienen una forma (su esencia: “ir al monte”, “recolectar setas”, “robar caza”) que coincide con la descripción de la acción que se realiza. Dicho de otro modo: para los platónicos y agustinistas medievales lo real se reduce a mismidad formal, a ser “algo” idéntico a sí mismo, cuya sustancia es simplemente el “algo” (“gateidad”, “caballeidad”, etc.). Th., Iª-IIae, q. Ejemplos de juicio moral: «En el caso de un adolescente decide realizarse un tatuaje en la piel, lo cual contraviene las reglas morales marcadas por su religión. 3, c.). Fue un filósofo profundamente aristotélico (basta observar la cantidad relativa de citas del Filósofo en sus obras). Pero sí lo hemos dicho. Después de esta excursión histórica, que nos ha permitido comprender la forma mentis de la filosofía esencialista, podemos pasar a ver las repercusiones que tiene este modo de considerar las cosas sobre la teoría ética. Por esta razón, podríamos decir que esa idea de fondo del agustinismo es, más bien, mentalidad. Aquí la Veritatis splendor se refiere al acto de elegir, pero es aplicable igualmente a la intención, que es también elección, no de medios (o fines intermedios), sino de fines. 18, aa. Desde hace más de 500 años se lucha en la humanidad por garantizar la libertad de pensamiento, la libertad de cultos y el ejercicio de la tolerancia. Esta respuesta ha sido certificada por un experto. Y son lo realmente real con una realidad distinta de la que se entiende espontáneamente respecto a las cosas: con la realidad que Platón suponía para las Ideas, es decir, con una realidad que es una propiedad lógica. Esta divergencia aparente es fácilmente explicable: la división del voluntario en directo e indirecto y en sí mismo (in se) e in causa es válida. El hombre, si ha sido adecuadamente previsor antes de actuar, conoce los efectos que van a derivarse de su acción, y sabe, si es el caso, que algunos son poco o nada deseables: son los efectos tolerados. La moral objetiva u orden moral objetivo es una referencia fija para la bondad de la conducta que vige en todos los actos voluntarios. 6. I: Christian Moral Principles —Chicago, Franciscan Herald Press, 1983, 971 pp.— y la reelaboración más madura en colaboración con Shaw Fulfillment in Christ. Dentro de este contexto, para ver si la voluntad es globalmente buena, tenemos que comparar si quiere, en conjunto, más bienes que males. Vol. Contingit autem hoc fieri tripliciter: ...; tertio modo, inquantum attingit effectum. Por tanto, toda acción humana concreta es buena o mala, aunque su decisión (que se describe con el objeto moral) sea realmente indiferente61. "postalCode": "31009", 11 y ss. Th., Iª-IIae, q. cit. El acto del hombre: el que procede del hombre sin dominio racional (que a uno le rujan las tripas, por ejemplo). El existir de las Ideas consiste en ser ellas mismas, en tener un “algo” o quidditas, y en nada más. En: La nueva sensibilidad, Espasa-Calpe, Madrid 1988, pp. Pero, a la vez, afirmó que, si se puede considerar que hay una potencia, es porque se considera la esencia de esa potencia, su “algo”. Juan descubrió que su esposa lo engañaba con otro hombre (Fernando). (15) Los ejemplos podrían multiplicarse, y no en desdoro de quienes sostienen esta tesis, pues no es una cuestión evidente a primera vista. Los tratados de moral de inspiración esencialista parecen omitir este extremo. Esta es la capacidad que tiene el sujeto para actuar por si mismo, en concordancia con lo que cree que es la mejor elección o alternativa. Sign in|Recent Site Activity|Report Abuse|Print Page|Powered By Google Sites, Elementos constitutivos del acto moral :). En los manuales de teología moral se ha tendido, en la primera mitad de este siglo, a exponer la doctrina de Santo Tomás de Aquino. En dichas acciones, la decisión de la voluntad versa sobre un objeto que, en sí mismo considerado, no indica orden ni desorden de la voluntad que lo elige. ... . Por poner una similitud describiendo un ente: nosotros describimos algo por su especie (un perro) y lo precisamos con accidentes que no cambian la especie, sino que le introducen modificaciones (de caza, faldero). “Principium autem bonitatis et malitiae humanorum actuum est ex actu voluntatis”: S. (7) A pesar de tratarse sólo de una condena local por un obispo, la sentencia de Tempier tuvo enormes repercusiones en la Iglesia universal, casi como las derivadas de las condenas de un concilio universal. (43) Cfr. 4, c.: “Si autem loquamur de bonitate actus exterioris quam habet secundum materiam et debitas circumstantias ...”. 8, a. Pero el significado de esta frase es distinto al aristotélico-tomista. Sin embargo, desde un punto de vista rigurosamente esencialista, con su insistencia en el objeto moral, que llega a ser confundido con la acción, quien se defiende no recibiría una neta aprobación50. 18, a. En tiempos históricamente recientes, se ha asistido a una recuperación de la filosofía de corte clásico que, inspirándose en los griegos (Platón y, especialmente, Aristóteles), tuvo una expresión privilegiada con Tomás de Aquino. Con ese “tocar” las conoce o las quiere. Como es evidente, esta consideración de lo que está alrededor del acto como circunstancias es perfectamente razonable y válida. ¿Qué son actos humanos y actos del hombre? El conocimiento prudencial es un conocimiento práctico, que mueve la voluntad —libremente— hacia la acción buena. Así, los factores que no caben dentro del fin y del objeto tienen un ámbito amplísimo donde incluirse. A Summary of Christian Moral Principles —Notre Dame, University of Notre Dame Press, 1991, 456 pp.—). Lottin tiene un análisis clásico de la virtud en Santo Tomás (Études de morale, histoire et doctrine. The Way ..., capítulo 6, pp. 6, ad 1. Viendo la acción física de una persona podemos sospechar lo que está haciendo, pero no llegamos a saberlo con plena certeza. Ante tal situación, Juan y Fernando se hicieron de palabras, discutieron y al final de la pelea, Juan sacó una pistola y lo mató por la espalda. Por tanto, hay que analizar, en primer lugar, el agustinismo medieval. "address":{ De acuerdo con la Teoría del Comando Divino, un acto moral es uno que Dios dice que es moral: " Jesús dijo" Dale a César lo que es del César ", así que debo pagar mis cuentas de impuestos ". Como se deduce de esta definición, el significado que se emplea aquí es más amplio que el más técnico y estricto que hemos empleado anteriormente. op. Cfr. Cabe también otro modo de emplear este término, menos técnico y más parecido a su empleo corriente. Santo Tomás, sin embargo, enfoca las cosas de modo algo distinto. ), y existen otras obras de indudable calidad sobre esta misma materia. En la primera mitad del siglo XX Mahatma Gandhi, el gran dirigente indio, logró el retiro de los ingleses y la independencia de su país sin necesidad de una guerra de liberación. Como conclusión de este planteamiento, le resulta necesario admitir que la potencia pura, la materia prima incluso, no es pura potencia, sino que es un cierto acto, ya que tiene un “algo”. "https://www.instagram.com/universidaddenavarra", El acto del entendimiento se encuentra imperado por el acto de la voluntad20. 4, c.; esa relación a la causa de la bondad es la intencionalidad de la voluntad. 494 y ss. Pero el agustinismo medieval es la corriente filosófica que tiene su origen en el platonismo corregido de San Agustín. La malicia moral -o la falta de bien-, de cualquiera de esos elementos hace que todo el acto sea malo. Pero, hoy en día ésta no es ya una, Plan de Estudio o Currículo de Asignatura, UNIDAD I Conceptos de Filosofía y de Ética. { Por otra parte, hay que tener en cuenta su cualidad de omnipresencia y difícil evitabilidad. EJEMPLO DE CASO. Dicho de otro modo: para un platónico y para un agustinista, lo realmente real (con el mismo tipo de realidad “ideal”) son los “algo” de las cosas. De hecho, los agustinistas medievales parecen describir el movimiento exclusivamente de modo formal (su inclinación es a averiguar cómo una cosa, de ser “algo” pasa a ser un “algo” distinto), y apenas aparece en sus consideraciones el movimiento analizado al estilo aristotélico: como una energeia que, partiendo de una entelequeia, alcanza otra, es decir, como una actividad que, partiendo de un origen, alcanza su acabamiento, término o límite4. Cfr. 43, a. Por motivacion puede entenderse como aquello que impulsa a actuar o perseguir, El motivo que nos puede impulsar a defender a un compañero de una injusticia o, el deseo de ayuda mutua, o el bien el deseo de notoriedad. La vuelta a Santo Tomás, después de un periodo de inspiración esencialista o formalista —que debe mucho a Suárez— se ha llevado a cabo, en buena medida, gracias al impulso de los Papas: ya desde León XIII, que inició la edición crítica de las obras del Aquinate, todos los pontífices han insistido en la conveniencia de inspirarse en sus reflexiones. Como vimos, el medio ejecutado, por ser objeto del acto voluntario, debe ser siempre bueno. Pero, a diferencia de Aristóteles, no fue nada polemista, sino profundamente conciliador, y se permitió asumir multitud de modos de decir del agustinismo medieval, tanto que sus posturas se pueden llegar a confundir con las del agustinismo que le rodea si no se aguza la atención en los detalles. 47-63, Richard A. McCormick. Se considera que un acto es moral cuando se ajusta o va en contra de un código, una norma o un sistema de valores. Por tanto, la potencia, aunque pueda recibir un acto, ya no es pura potencia8. Th., Iª-IIae, q. Creo que la propuesta que se hace puede cubrir dicho objetivo; de todos modos, para su aplicación, serán de gran ayuda las ideas más detalladas de Iceta93, que elaboró, casi simultáneamente con este artículo, un protocolo de análisis ético que me parece eficacísimo para resolver dudas en comités de ética. (92) Joan Costa Bou. Tras una acción moral hay causas que pueden ser conscientes o inconscientes. Así ocurre, por ejemplo, cuando el sujeto coloca por encima del fin las circunstancias al decidir sus fines en función de las circunstancias que lo rodean, pues con ello, su querer ya no es resultado no de su conciencia moral, sino de algo externo y ajeno a él. Complejidad creciente y crisis de gobernabilidad. Y, también bajo ese presupuesto, afirman que quienes defienden unos principios morales inmutables —los “deontologistas”— parecen no querer entender de qué se está hablando (cfr. Porque es inevitable que las expresiones “voluntario indirecto” y “voluntario in causa” hagan pensar que los efectos no son propiamente voluntarios, error, como vimos, típico de la postura esencialista, que parece reducir lo voluntario a lo que se relaciona inmediatamente con la voluntad: al objeto con sus circunstancias y al fin. Resulta preferible hablar directamente de intención. Será fácil para el lector encajar las ideas que ha leído aquí con los elementos nucleares del protocolo de Iceta. se puede decir que un mismo acto se puede realizar por diferentes motivos: buenos o malos, conscientes e inconscientes. 806203 apardo@unav.es, El “voluntario indirecto” o “voluntario in causa”, https://www.unav.edu/documents/18304422/19109437/el-concepto-medico-de-futilidad-y-su-aplicacion-clinica.pdf. Es así, como se puede concebir que un ser humano actúe con arreglo a la bondad o la . En toda accion hay una anticipación ideal del resultado que se pretende alcanzar, el fin trazado por la conciencia implica la desicion de alcanzarlo, dicho fin se prefigura, se anticipa, asi el sujeto conciente del fin se decide a realizarlo. Además, la previsión adecuada también abarca el suceder material de los hechos y las consecuencias previsibles22. Schüller, op. 4, c. (47) Dicha confusión del objeto moral con la acción física no es casual, pues se deriva del platonismo que subyace a la moral de inspiración esencialista. Juan descubrió que su esposa lo engañaba con otro hombre (Fernando). Este aspecto intencional del acto de la voluntad es admitido incluso por quienes critican a la Veritatis splendor su modo de enfocar el objeto moral: el acto voluntario es un “apuntar hacia” también para ellos18. De esta contradicción se puede derivar cualquier resultado. No es objeto de esta colaboración contribuir a ella. Su formulación varía de unos autores a otros. Partiendo de aquí, el análisis tomista del acto moral muestra aspectos distintos a lo que hemos visto anteriormente. Elección. Según esta opinión, la inmutabilidad del orden moral se derivaría de las acciones físicas: ciertas acciones físicas serían siempre malas, y los principios morales serían inmutables porque la realidad física, con sus leyes intrínsecas, es inmutable54. Así, siguiendo su ejemplo clásico, golpear a una persona es un pecado contra el quinto mandamiento. En toda accion hay una anticipación ideal del resultado que se pretende alcanzar, el fin trazado por la conciencia implica la desicion de alcanzarlo, dicho fin se. La solución son las rationes seminales, unas formas “pequeñas” que todo ente tiene en reserva para que las saque de ese estado oculto la causa motriz en el momento del cambio3. ¿Cómo influyen en la moralidad de una acción? Barcelona, Eiunsa 1992, pp. Llegamos, por tanto, a la conclusión de que, si en vez de examinar en una acción sólo el objeto, el fin y las circunstancias, examinamos la intención, la decisión-acción y la proporción de los efectos tolerados con lo que se intenta, las reglas del principio de la acción de doble efecto son superfluas, por estar perfectamente comprendidas e integradas en el enfoque del acto moral que hemos venido explicitando, más amplio y profundo desde el punto de vista teórico que el que se maneja normalmente. El Aquinate pone como ejemplos coger una pajita del suelo o ir al campo60. El acto bueno exige la bondad de sus 3 elementos. Esta interpretación, realizada al hilo del n. 80 de la Veritatis splendor, no parece acertada: como veremos a continuación, sólo una intención puede movernos a la acción. Son actos libres y deliberados. 2. Una de ellas, mencionada anteriormente, las describe así: a) que la acción en sí misma sea buena o indiferente, b) que la consecuencia mala no se siga directamente de la acción que se realiza, c) que se actúe con buen fin y d) que exista proporción entre el efecto bueno y el malo. La consecuencia inmediata es que toda realidad se puede describir con una palabra que expresa adecuadamente lo que es. Hemos visto que el término “circunstancias” tiene, para Santo Tomás, un sentido técnico (complemento accidental de la definición de lo que se decide), y este sentido es el que hemos empleado hasta aquí. Por tanto, los efectos tolerados no son medios, sino consecuencias previsibles —no suceden por casualidad— que se siguen siempre o la mayor parte de las veces de la acción que uno realiza, cayendo así dentro de la voluntariedad65; no son lo que se intenta (aunque sean, a su modo, voluntarios). Su relación con el acto de la voluntad es distinta a la de los efectos tolerados o consecuencias de la acción; concretamente, los medios no directamente ejecutados son queridos por el mismo acto de la voluntad que quiere el fin, es decir, por la intención. Por consiguiente, para entenderlo cabalmente, se hace necesario retroceder hasta Platón en busca de algunas ideas fundantes. Cuando desarrolla su teoría moral, Santo Tomás, al hablar de los actos del entendimiento que preceden a los de la voluntad, prefiere hablar de consejo24, es decir, del acto de la prudencia (acto intelectual) previo a la acción, y es más correcto considerarlo así. Si est praecogitatus, manifestum est quod addit ad bonitatem vel malitiam”: S. Conciencia del fin que se persigue. Entre las causas de esta vuelta a esquemas anteriores a la introducción de Aristóteles en Occidente, hay que reconocer el papel que jugó el espíritu conciliador de Santo Tomás. Las acciones humanas pueden dividirse en dos clases: las mecánicas y naturales (caminar, dormir, respirar, protegerse de un peligro físico, lavarse las manos, etc. Sujeto Moral. Pero los quiere. Así, quien mata a un agresor en legítima defensa, está defendiéndose (decisión), y el objeto moral (el “algo”, la descripción quiditativa de su decisión) es defenderse. Sin embargo, aplicando el esquema esencialista del objeto moral junto con la fácil confusión del objeto moral con la acción física47, esa acción sería mala (es matar a un hombre, que es una acción mala); y esta interpretación es sencillamente inaceptable. Lo moralmente bueno o malo, por lo que a la acción se refiere, es la decisión de la voluntad, el tender la voluntad hacia esa acción concreta44. Aunque rechazó de modo tajante muchos planteamientos agustinistas, en otras ocasiones aceptó las formulaciones que los filósofos de su época daban a los problemas. Al vivir en sociedad los seres humanos ejecutamos con frecuencia actos morales o éticos todos los días, pequeñas y grandes decisiones donde utilizamos nuestros valores y principios que no siempre coinciden con los de la sociedad en general. Quienes critican la postura de la Veritatis splendor, señalan, por contra, que la moralidad está determinada, al menos en parte, por la realidad física de la acción o de sus consecuencias, que pasan generalmente a denominarse bienes o valores premorales. Si autem includat aliquid quod repugnet ordini rationis, erit malus actus secundum speciem, sicut furari, quod est tollere aliena”: S. Quia si per se sequitur ex tali actu, et ut in pluribus, secundum hoc eventus sequens addit ad bonitatem vel malitiam actus: manifestum est enim meliorem actum esse ex suo genere, ex quo possunt plura bona sequi; et peiorem, ex quo nata sunt plura mala sequi. La razón estriba en que las personas toman decisiones movidas por actos previos de la voluntad, las intenciones. A la pervivencia de la mentalidad agustinista también contribuyó decisivamente la condena de tesis tomistas realizada por Esteban Tempier7. “Ir al monte” y “recolectar setas” es a la vez acto de la voluntad y acción que realiza el hombre. La tarea que se impone en primer lugar es definir exactamente qué es lo que se entiende por esencialismo —o formalismo, como también se ha llamado— y averiguar cuáles son sus características. 5. 4. (33) “Si el objeto de la acción concreta no está en sintonía con el verdadero bien de la persona, la elección de tal acción hace moralmente mala a nuestra voluntad y a nosotros mismos”: Veritatis splendor, n. 72. Fribourg, Editions Universitaires 1986, 139 pp.). Estos se hallan respondiendo a la pregunta '¿cómo? cit., p. 504. Lo subjetivo y lo objetivo son aquí como dos caras de la misma medalla. Ceder el asiento el autobús a una persona ciega o con otra discapacidad. Ese medio que se pone para conseguir el fin guarda con respecto al fin la misma relación que con respecto a los efectos no intentados: es su causa o, con otros términos, es un medio que lo produce. Dicho de otro modo: una intención buena no implica que las decisiones que se derivan de ella sean buenas. Uno de los problemas de la moral de inspiración esencialista es precisamente que, debido a sus presupuestos, no puede abandonar la descripción quiditativa de la acción y sólo puede considerar los efectos como circunstancias. 13, a. Some early ..., p. 495. Cfr. Aun así, el que la acción se ejecute de hecho hace completo el acto de la voluntad y, por esta razón, la acción consumada tiene más peso moral que la solamente decidida y no realizada46. Etica y moral; Cuestionario 2B1 Etica y moral; 36 people org culture; Analice la moral como fenómeno social [APEB 2-15%] Práctica 1 Resuelva un caso jurisprudencial sobre el control de decretos ejecutivos; Foro académico de ética y moral; Examen [APEB 1-10%] Actividad 2 Caracterice y diferencie a los sistemas éticos estudiados (APE)
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